Entrar y no saber qué fuiste a hacer a esa habitación, tener la palabra en la punta de la lengua, esa idea que crees es tuya la escuchaste hace dos días a tu compañero…olvidos normales que no deben quitarnos el sueño.
Si no sé dónde dejé las llaves, me pierdo en un lugar al que apenas fui hace tres días, el nombre de mi vecino viene y va como si tuviera vida propia ¿Será que ya estoy perdiendo la memoria? Me tranquilizo y me digo que no, que por edad aún no toca, aunque saberse todos los síntomas del alzhéimer no ayuda mucho a mi salud mental.
En tiempos de auge de término como salud cerebral, deterioro cognitivo, alzhéimer y demencia cualquier señal puede causar una alarma inesesaria. Hay muchas situaciones en que la memoria nos juega una mala pasada y es muy normal. Hoy te describimos 1 clásicos que entran en lo que podemos llamar normal.
CUANDO LA MEMORIA NOS LA JUEGA: 8 OLVIDOS NORMALES.
- Te olvidas de dónde has puesto determinados objetos: todo un clásico ¿Dónde puse las llaves? ¿El paraguas? ¿El libro? Generalmente el problema ahí no es para recuperar la información, sino que nunca estuvo en tu mente. Pusiste el objeto de forma automática en un lugar y simplemente no te fijaste.
- Entras a una habitación y no recuerdas qué fuiste a hacer: ¿a quién no le ha sucedido esto? De pronto te quedas en blanco y “¿A qué vine yo aquí?” Te lleva unos minutos recordar, incluso algunas veces volver hacia atrás y rehacer todos los pasos para saber cuál era tu propósito.
El fenómeno de cruzar una puerta cuenta hasta con una explicación dentro de la psicología: una investigación del año 2010 encontró que cambiar de espacios hacía que el cerebro codificara la información como dos eventos diferentes. - Tienes la palabra en la punta de la lengua: hablas con tu amiga, le quieres decir que ayer viste unos pantalones guapísimos en…en…. “lo tengo en la punta de la lengua”. Un conocido fenómeno del que ya hemos hablado y del que puedes conocer más detalles aquí.
- Crees que son tuyas ideas o informaciones que en realidad vienen de otra fuente: ¿Has pasado por el embarazoso momento de decir un dato a una persona creyendo que lo sabes por tu experiencia cuando en verdad hace pocos días te lo dijo ella misma? Pues yo sí, ja. Y es normal, se llama mal atribución.
- Recuerdas solo una parte del hecho: sabes que te encontraste con Juan justo el mes pasado pero no recuerdas dónde. O a tus amigas de la Uni, pero ya no a todo el año. Entra dentro de la normalidad recordar una parte de la información mientras otra queda un poco borrosa.
- Recorres sin problemas tu ciudad, pero cuando te preguntan una dirección te lías: si tienes que ir andando ahora mismo hasta el centro vas sin problemas, pero que no te pregunten cómo que ahí ya no llegas, que si derecha, que si izquierda, que en la calle….¿cómo se llama esa calle?
- Tú y tu marido parece que recuerdan un día diferente (o un viaje): qué maravilla el domingo pasado, partido, juego de cartas con los colegas…qué horror de domingo, la casa llena de gente hablando alto, yo haciendo comida…Nuestra memoria está grandemente influenciada por nuestras emociones, creencias, prejuicios. No nos asombremos de que al evocar un evento no tenga mucho que ver con lo que dice el otro.
- Leíste toda una página de un libro y no tienes idea de qué dice: otro clásico del despiste. Seguramente es que no estabas concentrado, eso nos pasa a millones de personas que no dormimos sino con un libro entre las manos.
Referencias
Harvard Health Publications. (2016, August 30). Forgetfulness — 7 types of normal memory problems – Harvard health. Harvard Health Publications. Disponible en http://www.health.harvard.edu/healthbeat/forgetfulness-7-types-of-normal-memory-problems
Radvansky, G. A., Krawietz, S. A., & Tamplin, A. K. (2011). Walking through doorways causes forgetting: Further explorations. The Quarterly Journal of Experimental Psychology, 64(8), 1632–1645. doi:10.1080/17470218.2011.571267
Artículo: http://www.2ti.es/nosotros/